Codeándonos con la realeza

Capitulo III

Codeándonos con la realeza*(imprescindible tener de fondo la música del link indicado al final del capítulo)

Aunque parece mentira es verdad. La prensa del corazón según mi opinión ha cambiado mucho, ha bajado su nivel. se ha desvirtuado la idea original. que bajo mi punto de vista es el siguiente: Las muchedumbres viven una vida soez, aburrida, con mucho esfuerzo llegan a fin de mes, idolatran el personaje que nunca serán y que anhelarían llegar a ser. El sueño de todo ciudadano de a pie seria casarse con un príncipe o princesa, véase el caso de Letizia Ortiz. Precisamente ésa es la prensa del corazón que a mi me interesa, es decir, vidas de personas inalcanzables, grandes bodas reales, actrices que se convierten en princesa, prostitutas que consiguen el amor de un magnate del petróleo. Pero esto lamentablemente ya no es así, hoy en día la prensa rosa se alimenta de carroña, de ex-concursantes de reality show, frickies que se disputan la autoría de una canción, gays que se acuestan con cualquiera para aparecer en cualquier magazín de tres al cuarto y así lucrarse a razón de 1700 euros por programa, un sueldo que no ganarán ni en mes y medio de cualquier trabajo cutre en nuestro país.

Pues bien, por lo visto uno de los contactos que llegan a nuestra redacción es el de una doctora de Valencia, ella tiene información acerca de la princesa, por lo visto el su ex-marido es el encargado de realizarle tratamientos para fecundar al próximo príncipe del reino. Como el tema tiene morbo, vamos a conocer a dicha mujer, nos invita a su mansión en una urbanización de lujo, allí nos da todo tipo de detalles acerca de los tratamientos de fertilidad, del secretismo que ello conlleva, de su deseo de aparecer en televisión explicando todo el tema, etc....

Todo va muy bien, incluso hacemos amistad y el viaje a Valencia se repite por 2 veces más. En la última visita le proponemos anunciarse en un programa de radio, y ella accede a firmar unos cheques por esa publicidad. Nos vamos a casa, y pasado un día recibimos una llamada con llanto, lloros, sollozos de la mujer, implorando que no cobremos los cheques, que se ha arrepentido y no lo quiere hacer.

Acto seguido le mandamos los cheques por correo junto con toda su documentación. Y punto y final?

No, aquí no acaba la historia. D. comienza a recibir llamadas de todos los medios en los que ha trabajado: “Una mujer nos ha llamado diciendo que hablas mal de nosotros, dando datos, información y estamos muy enfadados contigo”…. En fin, ya sabemos que cuando una persona se encuentra acorralada maquina demasiado y aflora toda su maldad.

Gracias a dios al fin todo acabó bien, por cierto, porqué os indico que la canción que ha de sonar de fondo mientras leéis este capitulo? Porque me da la gana.






* http://es.geocities.com/paginaguarra/cancion1.mp3

una fiesta con corazones

Capitulo II

Una fiesta con corazones

En efecto, el principio del nuevo año fue maravilloso, pude conocer a una persona encantadora. En un principio pensé que me quería engañar, diciendo que era amigo de famosuelos y famosos del panorama actual. Yo no me dejo eclipsar tan fácilmente, porque realmente no soy n ada mitómano, así que dejé pasar los días para ver dónde quería llegar el muchacho.

Realmente no sé porqué, pero nos conocimos en persona y me invitó a una fiesta, la entrega de los premios “cuore” en Barcelona, concretamente el día 5 de febrero en un local pijísimo de la ciudad condal.

La idea era la siguiente: él vendrá de Barcelona en tren, le recogeré en la estación y nos iremos juntos en coche hasta Barcelona, porque yo trabajo en turno de mañana (de 7 a 15 h), así cuando la fiesta termine me vendré en mi auto hasta Reus. Así lo hicimos, pero no contábamos con un pequeño detalle.

Al llegar a Barcelona había que ir a buscar a 3 peces “gordos”, pero muy gordos al hotel en que se hospedaban, en concreto en el Prat de Llobregat. Una vez en el hotel, entraron en el coche y nos dirigimos hacia la gran ciudad, como ya he comentado eran bien orondos y el coche no tenía fuerza suficiente, al llegar al paseo de gracia, el coche apestaba a quemado, y uno de los “rechonchos” indicó: “te has dejado el freno de mano puesto”, así que los eché del coche para que tomaran un taxi.

Llegamos a la fiesta justo antes que comenzara, allí estaban Karmele Marchante, Maria Patiño, Kike “Torito”, Maxim Huerta, Consuelo Alcalá y algunos más que no conozco.

Se dieron los premios correspondientes, y al finalizar estuvimos en la sala vip un rato, hasta que finalmente decidimos irnos, paramos en un hospital a hacer un pipi, y ahí, sin pensarlo decidimos que en vez de llevarlo a su casa, lo llevara a Reus, ¡se venía conmigo!

Fuimos al Hotel Gaudí, dormí 2 horas y me fui a trabajar.

A las 15 llegué de nuevo al hotel y estuvimos durmiendo un ratito, poco porque el teléfono no paró de sonar, era una de las homenajeadas que tenía problemas con el avión.

Cogió el último tren y se fue para su casa......

A-morfosis

Últimamente llevaba una vida muy lineal, no pasaba nada interesante, el trabajo me absorbía en demasía, hacía turnos: 7 días de noche, dos de fiesta, 7 de tarde, dos de fiesta, 7 de mañana y 3 de fiesta.

La carrera la tenía super olvidada, me daba rabia pagar la matricula para no acudir a ninguna clase con lo cual, los suspensos iban a ser evidentes.

Los fines de semana que libraba, es decir, uno al mes, me lo pasaba en “suau”, un pub de Reus sin nada especial pero cerca de casa, con música diferente, gente agradable y camareros simpaticos.

Se acercaba fin de año, y sin planes a la vista, decidí quedarme en el trabajo con Noelia, la chica que tenía que trabajar esa noche, para que no se comiera las uvas sola. Siempre me ha parecido una tradición estupida pero es la única que he seguido a rajatabla por la superstición de: “si no te comes las doce uvas el año que comienza te irá fatal” total, no costaba nada chupar las uvas y escupirlas al finalizar el ritual.

La verdad es que esa noche tuve un presentimiento, el año que entraba iba a ser diferente, especial, no iba a seguir con la misma vida monotona y vacía de sensaciones, haciendo siempre lo mismo, es decir: NADA.

Lo pasamos genial, bebimos “champín” sin alcohol… estuvimos bailando hasta las 5 de la madrugada en la empresa que más adelante protagonizará otro capítulo importante en esta historia, que no ha hecho mas que…. Comenzar….